Recientemente cambié la placa base de mi equipo de sobremesa por una Asus P5G41T-M LX que me salió muy baratita y tenía todo lo que necesitaba (ethernet gigabit, sonido 5.1 integrado, gráfica integrada, soporte para un Core 2 Duo que me regalaron…)

Total, que después de instalar y actualizar todos los drivers, el equipo seguía sin poder entrar en estado de suspensión. Bueno, realmente sí que entraba, pero se encendía él sólo sin tocar nada al momento.

Googleando por varios sitios encontré información útil acerca de varios parámetros de powercfg (a ejecutar en una línea de comandos con privilegios elevados) que viene bien tener a mano para casos de este tipo:

powercfg -requests
Nos muestra qué es lo que ha hecho al equipo despertarse.

powercfg -devicequery wake_armed
Muestra la lista de dispositivos que son capaces de encender el equipo. 

powercfg -devicedisablewake «nombredeldriver»
Evita que ese driver pueda despertar al equipo.

En mi caso, el problema estaba en un receptor de infrarrojos (detectado como teclado USB) que tengo para un mando a distancia (VID 0766 PID 0204), simplemente ejecutando lo siguiente fue suficiente para solucionar el problema:

powercfg -devicedisablewake «Dispositivo de teclado HID»

Con powercfg -devicequery wake_armed veo que tengo más dispositivos capaces de levantar el equipo, pero los dejo activados porque me interesa (a través de un magic packet [Wake On Lan] en la ethernet, y con otro «Dispositivo de teclado HID», que es el teclado de verdad).

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